lunes, 12 de febrero de 2024

UN ASUNTO DE HONOR

Figuras del toreo americanas, en América muchas, que lo hayan sido también máximas en España, muy pocas. Pueden contarse con los dedos de una mano, más uno quizá. Figuras digo, de tauromaquia, de afición, de multitudes, de contratos, de mandato.

(Por: Jorge Arturo Díaz Reyes)


El más reciente caso, sin duda, Andrés Roca Rey. El joven peruano, puntero actual del escalafón, y dueño de las taquillas, que con su personalidad y toreo veraz ha cautivado los públicos hispanos y del mundo, (con petardo y todo, acaba de llenar La México, la plaza más grande del mundo) y gran parte de la jamás unánime crítica. Liderato pretendido por todos, de propiedad tradicional española, que solo han interrumpido en la historia esporádicamente los ultramarinos…

Mariano Ceballos “El Indio”, salido de Acho a finales del Siglo de las Luces, que montaba los toros asombrando la Península hasta que murió en la plaza de Tudela. Tanto impacto tuvo, que fue inmortalizado por Goya en cinco de sus obras, más que cualquier otro torero.

Rodolfo Gaona, el mexicano, que a comienzos del siglo XX se acaballó en dos épocas; la de Bombita y Machaquito y luego la de Joselito y Belmonte. De quien escribiera el historiador español Néstor Luján: “Gaona fue un artista extraordinario… la elegancia más auténtica de la Fiesta, solo comparable, según los aficionados antiguos, a Lagartijo…”

ORIGEN DE LA FIESTA BRAVA EN HUALGAYOC

La lidia de toros en Hualgayoc (Cajamarca) viene de la españolísima costumbre, remontada 30 años después (1800) de descubierto el asiento minero por Torres de Ocaña, en honor a su Patrona, Santísima Virgen Carmen.

(Redacción: Perú Toros / Edición: Max Kevin Mendoza Chuquilin) 

Fotografía de la Plaza de Armas de Hualgayoc, perteneciente a los años de 1880 en adelante, se muestra las corridas de toros en el actual pueblo después de El Purgatorio.

Para la lidia de los toros, los más connotados mineros del Asiento, todos cristianos viejos y españoles se sangre azul, importaron sementales de pura casta desde la Madre Patria a los que echaron a pastar libremente en las extensas jalcas aledañas del paso de Coimolache, donde abundan jugosos pastos naturales.

Descendientes de estos sementales hasta los años 60 más o menos, se criaban en las ganaderías de toros de lidia de Quilcate y Chala, situadas en la comprensión de la provincia.

Muchos Hualgayoquinos que recuerdan con emoción esta tradicional festividad repiten:

¡Qué grande es la fiesta del Carmen!