Destacaron por su raza y nobleza dos ejemplares de San Isidro. Al 4° le cortó una oreja Emilio Serna y López perseveró y le arrancó un apéndice al complicado 3° de El Molino. El Chechu firmó lo más artístico de la tarde ante el enclasado 2° de San Isidro, pero su arrebato no le alcanzó para agitar las peludas en el primer festejo en honor al patrono Señor de la Ascensión.
(Desde Puquio, Lucanas, Ayacucho, textos y fotos de Juan Medrano Chavarría)
Con la plaza Antonio Navarro rayando en lleno, en tarde soleada pero de gélido frío en la sombra, se lidiaron seis ejemplares de San Isidro 2° y 4°; El Molino 1° y 5°; y Agua Luna 3° y 6°. Mejor presentados los de El Molino, ganadería parinacochana del señor Alejandro Poma Sevilla, que se vinieron a menos en el último tercio; los de Agua Luna, de Chaviña, también de la región parinacochana, huidizos y escupidos del caballo; en cambio los de San Isidro, del señor Paco Gutiérrez, que pastan en la provincia de Páucar del Sara Sara, aunque algo terciados, cumplieron embistiendo humillados e incluso mostraron raza en el tercio de varas.