Otro rincón del Perú profundo donde las fiestas tienen que ser con corridas de toros.
(Por: Pablo Gómez Debarbieri / Foto: Juan Medrano Chavarría)
Huamachuco, en la sierra de La Libertad, celebró su tradicional feria de la Virgen de la Alta Gracia. La tierra de Guzmán Aguirre, mecenas taurino que impulsó la carrera de Andrés Roca Rey, celebró tres corridas con exitoso resultado artístico. La sierra liberteña, como el resto del Perú, es taurina; en ese rincón del Perú profundo no entienden sus festividades sin corridas de toros.
El sábado 17 de agosto, los españoles Oliva Soto y Alberto Lamelas con el peruano Alfonso de Lima, ante toros nada fáciles de San Simón. Triunfó Alfonso: dos orejas del tercero y palmas en el sexto. Lamelas, valiente: oreja del segundo y palmas en el quinto. Oliva no estuvo afortunado.
El domingo 18, los españoles Iván Vicente, Paco Ramos y Javier Cortés, ante los de San José del Monte, disparejos de presentación y juego. Ramos indultó a su primero, de buen juego, aunque casi no fue picado; por momentos no corrió la mano todo lo largo que el toro pedía. Vicente, una oreja a su primero, poniéndolo todo él, y Cortés, valiente con un mal lote.
El lunes 19, buena corrida de Camponuevo, de Rafael Puga. El mexicano José Angelino no lució sus toros, preocupado en torear para la galería. El español Esaú Fernández pinchó al quinto y perdió la oreja. El peruano César Bazán El Yeta: oreja del tercero; estuvo bien con el buen sexto y lo indultó.
