En este bello rincón de la yunga arequipeña, se celebró una corrida de toros en honor a la Santísima Cruz del pueblo. Se lidiaron reses de la región taurina de Parinacochas, con un ejemplar de Iván Rodríguez que descolló por su bravura y otro de Navarrete que fue un dechado de buena clase. El Yeta, Paco Cortés y El Shilico tocaron pelo y la jornada salió redonda pese a que el último ejemplar fue lidiado en el ocaso de la tarde.
(Desde Tiruque, Caravelí, Arequipa, textos y fotos de Juan Medrano Chavarría)
Subiendo desde las calurosas playas de Chala, en el litoral sureño, entre médanos resecos y cerros pedregosos, se encuentra el pueblo de Tiruque, famoso por ser uno de los principales emporios productores de palta de altísima calidad. Allí en mayo se celebra con fervor a la santísima cruz y sus hijos se esmeran por brindar alegría a sus coterráneos y visitantes.
En Tiruque la afición por la fiesta de los toros tiene larga data. Cada temporada el buen grupo de aficionados del pueblo se esmera por obsequiar un imaginativo cartel. Esta vez la corrida fue picada y los cinco ejemplares de casta de Azursa, Iván Rodríguez y Hermanos Navarrete, saltaron bien presentados, observaron buen desempeño y algunos exigieron credenciales a los que se pusieron delante.
Destacó por su poderío, variedad y firmeza el diestro ecuatoriano Paco Cortéz, que estuvo solventísimo ante el castaño de Navarrete que hizo 2°, de buen fondo pero poco humillado al que hizo interesante trasteo sobre ambas manos, sometiendo, pisando terrenos comprometidos y matizando su quehacer con adornos toreros tras efectuar el toreo fundamental. A pesar de encajar una estocada entera y marrar luego, escuchó tres recados y su buenhacer se vio empañado en cierto modo por estas circunstancias que en conjunto no restaron méritos a la buena planta del torero norteño. Con el 5° estuvo sensacional con el capote, espectacular y superior con las banderillas, y sólo la oscuridad reinante nos impidió disfrutar de una faena de alta cota dada las extraordinarias condiciones del buen pupilo santacolomeño de Navarrete. El ambateño paseó una oreja y su toreo dejó buen sabor de boca.
Al Shilico le tocó el de menos opciones. Un toro negro de Navarrete que sólo tuvo medio pase pero que arreaba con poder cuando se lo proponía. El torero cajamarquino porfió siempre para robarle pases y puesto en el sitio sin arrugar, logró muletazos sueltos de mucha valía, algunos en redondo, hasta lograr una estocada que le valió un merecido trofeo. El Yeta sorteó el mejor lote. Su 1° de Azursa aunque terciado, tuvo nobleza, obediente y humillado, logrando muletazos sobretodo con la mano derecha. El pinchazo hondo no le bastó y su premio fue una vuelta al ruedo. El 4° fue un precioso toro de don Iván Rodríguez O’Donell, de capa negra, lucero y girón, el más bravo de la tarde. En el capote le faltó lidia y arremetió en dos ocasiones contra las cabalgaduras, tomando un sensacional puyazo del piquero Calín empujando sin dolerse. Fue tras la muleta con celo y codicia pero si bien El Yeta estuvo allí, le faltó mejor colocación para ligar las bravías embestidas del toro, que tras el primer muletazo volvía por abajo buscando acometer. En ese vaivén el cajabambino echó mano del recurso y resolvió la exigente papeleta con una estocada que si bien no en el sitio, sirvió para saldar sus cuentas y llevarse las dos orejas del gran pupilo parinacochano.
Ficha. Martes día 21 de mayo del 2019. Tarde soleada y plaza llena. Reses de Azursa 1°, Hermanos Navarrete 2°, 3° y 5°, e Iván Rodríguez 4°, en general bien presentadas y de buen juego. Resultado Artístico: César Bazán “El Yeta” (Sangre de Toro y Oro) Pinchazo hondo, vuelta al ruedo. Estocada delantera y caída, dos orejas. Paco Cortéz (Blanco en Azabache) Tres avisos. Pinchazo y estocada entera, oreja. Anderson Rodríguez “El Shilico” (Primera Comunión y Oro en Azabache) Estocada delantera, oreja en el único que estoqueó.
El pueblo de Tiruque, uno de los valles palteros más productivos del Perú.
Con la banda Unión Juventud Coracora en los prolegómenos del paseíllo.
Y los espadas deseándose suerte.
El 1° del Yeta fue noble e iba humillado...
Pero el 4° traía carbón y muy repetidor...
Y el torero cajabambino triunfó.
Paco Cortéz es torero de buen concepto...
Que manda y se embragueta...
Saldando su actuación con una oreja del 5°.
El Shilico ya está en otro plan. Aquí se dobla con torería...
Y en este otro muletazo muestra sus verdaderas credenciales ante un animal que no le daba prestaciones...
Paseando un merecidísimo trofeo.
Con el bonito detalle de haberle brindado la muerte de su toro al Yeta.
