Es el mes de las cruces, de las flores y de la cosecha de choclos en las parvas andinas. También del florecimiento de la fiesta de los toros, que recobra su vitalidad con numerosos festejos en el centro del país y el altiplano sureño. El fin de semana anduvimos en Ajoyani, distrito de la provincia puneña de Carabaya, a 4,000 metros de altitud, donde se dieron toros en tarde de lluvia y granizo.
(Juan Medrano Chavarría)
A la usanza tradicional –de solemne respeto por la tierra y los apus que resguardan las comarcas-, se celebran las corridas de toros por estos lares, donde aquel tradicional personaje denominado Pacco –especie de agorero encargado del sagrado ritual del toro- señala el camino del alferado por las calles solitarias del pueblo, rumbo a la plaza de toros…