La plaza de palos “Sevilla” es seña más que evidente del auge de los toros en el Perú.
(Texto: Pablo J. Gómez Debarbieri / Foto: Perú Toros)
Los palcos, construidos con palos, copados de público, sin perder detalle de las corridas.
La “Sevilla” se forma con palcos de tres pisos, hechos con palos, que conforman un enorme ruedo de más de 100 m de diámetro. Son alrededor de 400 palcos, que se adquieren con anticipación, para poder acudir en familia a los festejos taurinos −espectáculo imprescindible en Celendín− cada una de las cinco tardes.
Alguna vez se quiso construir una plaza firme en Celendín, pero los shilicos no querían dejar su plaza de palos y aquel coso tuvo que transformarse en un coliseo deportivo.
−Andrés en Celendín−
Este año, Celendín ha hecho el esfuerzo de que Andrés Roca Rey toree allí y él ha tenido el mérito de interrumpir su temporada europea para actuar frente a sus compatriotas. En los otros cuatro festejos torearán el español Salvador Cortés, el portugués Nuno Casquinha, la mexicana Hilda Tenorio, el rejoneador venezolano Francisco José Rodríguez, el peruano Emilio Barrantes y el novillero nacional Carlos Cabello.
−Cultura auténtica−
Viendo lo que sucede en Celendín y su masiva afición por la tauromaquia, lo que se replica en centenares de pueblos del Perú, pero que la plaza de palos “Sevilla” refleja de forma maravillosa, se hace evidente porqué el Tribunal Constitucional, en la Sentencia 0017-2010, dictaminó que la tauromaquia es una expresión cultural auténticamente peruana, que es consustancial con las festividades de muchísimos pueblos del Perú y que el hecho de no gustarle a algunas personas, no desvirtúa lo anterior.
