Con su toreo asentado, templado y de buen gusto, -a más de sortear los lotes más toreables- el diestro toledano se alzó con el trofeo de San Antonio de Padua. Buena entrada en las tres tardes y solo el muy discreto juego del ganado frustró un resultado artístico más halagador…
(Desde Lajas, Chota, Cajamarca, textos y fotos de Juan Medrano Chavarría)
Como se esperaba, Lajas vivió tres tardes de toros de pura emoción, con el recurrente tema del ganado, que si bien en líneas generales saltó bien presentado, no dio el juego esperado. Empero, hubieron otros detalles como amagos de cornadas y tumbos a los picadores, que mantuvieron en vilo a los más de seis mil espectadores que coparon tarde a tarde los graderíos del monumental coso lajeño.
El cartel prometía en el papel, con dos toreros de batalla y además virtuosos de las banderillas como el francés Mehdi Savalli y el venezolano Fabio Castañeda; y por el lado del sentimiento y las buenas maneras estaban el nacional Cubas y el español Luis Gerpe, éste último torero de especial corte que debutó en ruedos peruanos el pasado 13 de octubre en la localidad ancashina de Ticapampa.
Con sol radiante,- como suelen ser las tardes de julio en este templado distrito-, el viernes día 7 de julio se dio el primer paseíllo guardándose póstumo silencio por la desaparición del gran Iván Fandiño. Aquella tarde el ganado saltó disparejo de presentación y juego primando la sosería por encima de la bravura. Del lote de Cubas el San Simón que hizo 4° tuvo buena condición en el capote, tomando por abajo la muleta pero sin ser agradecido, revolviéndose y buscando las zapatillas. Los muletazos fueron templados pero la falta de remate de las embestidas impidieron coronar el buen hacer del huancaíno. El corrido 2° también de San Simón y en suerte para Savalli tuvo transmisión y mucha movilidad. Muy emotivo el saludo capotero pero en el último tercio el temperamento del animal rebasó las facultades del torero, que tras ser achuchado y pasar momentos de apremio logró pasaportar defectuosamente y largamente premiado con los dos trofeos del cornúpeta. Castañeda tuvo una mala tarde primero ante el complicado 3° del Olivar y en el ocaso de la tarde ante el orientado 6° de San Simón, que le hizo transitar la calle de la amargura al cogerlo feamente y propinarle severa paliza de la que felizmente salió bien librado.
Al día siguiente la tónica del ganado fue casi la misma. El 1° de Cubas fue una mole semoviente atacada de sosería, en tanto el 4° pésimamente presentado restó valor a su insistente quehacer. El primero de Savalli fue un Salamanca que midió desde el principio, sin definirse y con guasa. El 5° de San Simón se movió sin clase y el torero tampoco se metió con él, abreviando sin más en ambos. Gerpe se llevó la guinda con un lote a punto para su toreo de pasmo y sentimiento. El 3°, un salpicado de don Roberto Puga, tuvo la virtud de la nobleza y el torero dibujó con el capote un par de verónicas para lienzos. En la muleta le tragó y hubieron series de gran calado con la mano izquierda. El 6° de San Simón, a pesar de su poca fuerza, fue un toro que por el lado derecho embistió con regularidad permitiendo gustarse otra vez al toledano, destacando aquel gran final de faena con bernardinas muy ceñidas intensamente jaleadas por el público. La estocada, si bien caída, derrumbó al duro animal y cayeron las orejas ante la presión del público.
En la última tarde, domingo día 9 de julio, se registró un lleno de bandera y Savalli abrevió otra vez al no poder sacarle un pase al grandullón Salamanca que abrió plaza. Con el 4° de San Simón tampoco pudo reponerse por la lesión del animal en los traseros. Fabio Castañeda tuvo entre manos un buen toro de San Pedro que iba templado y pastueño por el pitón derecho, cuajando derechazos con cierto dominio pero sin estar a gusto. El 5° fue un voluminoso y chochón de San Simón al que el llanero no quiso ver y se le fue entre sopor y sopor, siendo largamente premiado en ambos por el señor de la presidencia. Gerpe volvió a encumbrarse tras entender a la perfección al 3°, un cumplidor del Olivar al que desorejó doblemente; el 6° de San Simón sí que lo espantó y estuvo a punto de calarlo.
Cayó el telón con el español Luis Gerpe como triunfador de la feria, San Simón mejor ganadería y Rónald Sánchez como el banderillero más destacado. Pegamos la vuelta para aquerenciarnos en la bella Cajamarca, esperando el redoble de timbales anunciando el paseíllo inaugural de la gran feria de Bambamarca.
Paseíllo inaugural de la feria de Lajas.
Cubas con este toro que medio le embistió en la primera tarde...
Lo demás fue sosería semoviente.
Mehdi Savalli tuvo entre manos uno de los mejores toros de la feria...
Que casi lo cala...
Pero así, descalabrado, volvió...
Para pasear estar orejas cariñosas.
Fabio Castañeda lució entusiasmo...
Y tuvo un buen toro en la última tarde...
Que le permitió triunfar.
Gerpe puso el pasmo y el gusto...
Pasando apuros con este San Simón...
Pero disfrutando finalmente...
Y triunfando con justicia...
Se llevó el trofeo de la feria, junto al banderillero Rónald Sánchez, que también fue reconocido por su buen desempeño en esta feria.
