Cuajó faena de maestría a un impredecible viñero. Los seis de seis embistieron y la tarde abrochó en triunfo para la terna, ganadero y burgomaestre, en histórica corrida en esta acogedora provincia de los andes cajamarquinos.
(Desde San Miguel, Cajamarca, Juan Medrano Chavarría)
En muchos años no habíamos atestiguado una corrida donde todos los toros embistieran, exhibiendo acometividad, clase y, en menor grado, dificultades. Eso sí, con bravura a cuentagotas. Un encierro bueno, como dicen los toreros cuando están a gusto y la nobleza de sus enemigos les permite relajarse, encajados y con las telas barriendo la arena.