La afición limeña colmó la plaza para disfrutar de una excepcional tarde de toros a cargo de Morante de la Puebla, José María Manzanares y Andrés Roca Rey.
(Redacción)
La desbordante expectativa generada por este broche de oro ferial a Acho 2016 culminó con Manzanares y Roca Rey en volandas, tras cortar dos orejas el alicantino y pasear 4 el diestro limeño, paseando una Morante. La corrida de García Jiménez tuvo matices que sirvieron para la emoción del respetable en las faenas de la terna.
Desde la apertura de capote en ambos oponentes se dejó sentir el aroma del toreo de Morante de la Puebla. Siempre componiendo con las formas características de su toreo el capote a la verónica fue muy aclamado, al igual que, toreando despacio y suave con la muleta. No fueron los trasteos cargados de detalles, pero sí del toreo fundamental, con una primera labor entonada y del gusto de los asistentes y una segunda más poderosa delante de un toro que no puso las cosas fáciles y el sevillano supo resolver. Paseó una oreja tras doblar el primero y fue silenciado en el cuarto.
Lima recordó a la figura de Manzanares padre en el trasteo del triunfo de Manzanares hijo. Chicuelinas de mano baja, enjundia y profundidad en las tandas de muletazos por ambas manos y el empaque que este diestro impone en sus faenas. Con su primero también pudimos ver un toreo inteligente y capaz, siempre encajado y templado en una faena que se quedaría sin premio al ponerse incómodo el burel en la suerte suprema, paseando dos orejas del lidiado en quinto lugar, al que se le dio la vuelta al ruedo.
El idilio de Roca Rey con su plaza es imponente. Toreando con entrega en su primero desde el recibo y con muchísimo valor impuesto en las series de la pañosa, donde se supo pasar el toro por la espalda con la izquierda y torear con poderío y largueza en derechazos imponentes para pasear sus primeras dos orejas y redondear la tarde a revientacalderas con verónicas de rodillas y larga cambiada para rematar o el inicio pegando una arrucina también de hinojos continuado por una tanda a diestras. Puso absolutamente todo el torero limeño para coronar una tarde en la que le vimos torear con gusto y mucha clase para abrochar el cierre ferial con otras dos orejas, sumando cuatro a su esportón y siendo paseado en hombros junto a José María Manzanares al finalizar la tarde.
Plaza de toros de Acho, quinta de abono.
Toros de García Jiménez, el 5° de vuelta al ruedo.
Morante de la Puebla, oreja y silencio.
José María Manzanares, silencio y dos orejas.
Andrés Roca Rey, dos orejas y dos orejas.
(Comunicación y Prensa Casa Toreros Consorcio Perú)
Morante de la Puebla.
José María Manzares.
Andrés Roca Rey.