Aunque las reses de Monterrey no dieron el juego esperado, cayeron las orejas y la tarde fue de triunfo para el torero de la tierra, que se alzó con el escapulario de la Santísima Virgen del Carmen. Oliva Soto fue distinguido por la mejor faena; Serafín Marín premio a la mejor estocada; Paiján triunfadora entre las ganaderías y El Manco como el banderillero más destacado.
(Desde Bambamarca, Cajamarca, textos y fotos de Juan Medrano Chavarría. Imágenes aéreas: Luis Rodríguez Sánchez).
Ficha. Martes día 19 de julio de 2016. Tarde soleada con tres cuartos de entrada. Reses de Monterrey, 1°, 2°, 3°, 4°, terciadas y descastadas; y El Olivar, 5°, y La Viña, 6°, justos de presentación y mejor juego. Serafín Marín (Espuma de Mar y Oro) Estocada delantera y caída, descabello, palmas. Pinchazo, estocada baja, estocada entera, estocada entera, silencio. Michelito Lagravere (Verde y Oro) Estocada trasera, tendida y contraria, tres descabellos, saludos. Media estocada tendida, media estocada caída, dos descabellos, palmas. César Bazán El Yeta (Sangre de Toro y Oro) Estocada delantera, oreja. Estocada entera y caída, dos orejas.
Imagen aérea del parque principal de la bella y acogedora ciudad de Bambamarca, cuna de los coremarcas, enclavada en los andes nororientales del Perú...
Con su monumental plaza de toros edificada e inaugurada en el año 2000, durante la gestión del señor Esteban Campos Benavides.
Y la terna saludando a la afición. Aparecen El Yeta, de sangre de toro, Serafín Marín, de Espuma de mar, y más atrás, Michelito Lagravere, de verde oro...
Abriendo plaza el torero de Cataluña, Serafín Marín, quien lidió un lote prácticamente imposible...
Agarradísimo al suelo...
Incluso este 4°, mansote y peligroso...
Que saltó la valla...
Y se dio un dramático paseo por el callejón de la plaza.
Michelito tuvo pocas opciones con el 2°, pero de hecho, le hizo falta pausa y temple para sacarle partido al desencajado de Monterrey...
Al que pudo cortarle las orejas...
De no marrar con la espada...
El 5°, del Olivar, se dejó...
Pero sólo duró seis muletazos.
El Yeta se llevó el lote...
Brindando la muerte del jabonero al señor alcalde Edy Benavides Ruiz...
Y muy a gusto con este jabonero, que tuvo mucha nobleza...
Y repetidor...
Paseando las dos orejas del colaborador de Monterrey...
Con el 6°, de La Viña, que saltó al caer la noche...
Salió a por todas, derrochando entrega y mucha actitud.Estas virtudes, aunadas al excelente filo de su espada, le valieron ser declarado triunfador...
Junto a Aníbal Vásquez, que muestra el trofeo a la mejor ganadería; Serafín Marín, mejor estocada, y El Manco, mejor banderillero...
Junto al señor alcalde, en salida triunfal al caer la tarde.
