El peruano toreó en la novillada de Garlin, Francia, ante novillos de la ganadería salmantina de Pedraza de Yeltes.
(Fotos: Roland Costedoat)
Ovacionado en el primero de la tarde, Miralto Nº 9, tras una faena de mucho mando, sin dejarse tocar los avíos e intentado hacer romper al novillo siempre para adelante. Hubo derechazos con gusto, largos y rematados con pases de pecho hasta el final. Pudo cortar la oreja pero la espada privó de tal premio.
El cuarto de la tarde y segundo de su lote, Bello Nº 38, fue bravo e hizo una buena pelea en el caballo. Joaquín Galdós le hizo una importante faena con series de mucho mando, limpias, ligadas y de mucho contenido. Nunca bajo el nivel de la faena llegando mucho a los tendidos la actuación. Pudo cortar las dos orejas pero la espada dejó el premio en una pero con mucha fuerza.
El peruano Joaquín Galdós