El torero de Huancayo se inventó un toro de Salamanca que no valía un cobre. Saldó la tarde con tres orejas en el esportón y volvió a ser aclamado por el público cruceño. Floja y escasa de fuerzas la corrida de Salamanca. Mañana cae el telón de la feria con un interesante cartel de banderilleros; Sebastián Vargas, Cristóbal Pardo y Fernando Roca Rey ante toros de San Pedro.
(Desde Santa Cruz, Cajamarca, textos y fotos de Juan Medrano Ch. Especial para Perú Toros y revista Fiesta Brava)
El segundo festejo de la feria de Santa Cruz saldó con el inobjetable triunfo del diestro peruano Juan Carlos Cubas, que estuvo a gran nivel ante el 4°, un dubitativo toro de Salamanca que frenábase y quedaba a medio pase. La lección de esta faena nos recordó que todos los toros tienen su distancia y muchos toros se van inéditos cuando el lidiador carece de la técnica y el valor suficientes para pisar terrenos comprometidos. Cubas lo entendió y tras sobarlo se lo metió a su poderosa muleta en derechazos y naturales ayudados de mucho mando y contenido estético. El espadazo fue contundente y tras doblar el toro la plaza se copó de pañuelos blancos. El 1° tampoco predecía nada; sin fuerzas y escaso de raza hubo de encelarlo con temple para que se arrancara. Cubas también aplicó el catálogo y tras certera estocada paseó un trofeo.