Los chavales de la Escuela Taurina del matador de toros Paco Céspedes tienen intensa actividad por estos días. Ayer el alumno Carlos Martínez mató su primer becerro y hay muchos que demuestran cualidades.
(Juan Medrano Ch.)
La finca Soledad ubicada a inmediaciones de la calurosa ciudad de Chiclayo, es el bastión de la escuela taurina del joven matador de toros de dinastía Paco Céspedes. Allí jóvenes prospectos de distintas regiones del país se forman en los conocimientos de la tauromaquia.
Paco nos informa que el becerrista Carlos Martinez Alvarado, de Tarma, Junín, mató su primer ejemplar a puerta cerrada con muy buenos resultados, demostrando gran afición, entrega y cualidades para llegar a ser un gran matador de toros. También destacaron, entre otros, Luis López y Lucio Monterola, quienes torearon dos becerras mostrando avances en sus conocimientos de lidia.
La escuela cuenta con una veintena de alumnos y muestra intensa actividad en el verano. Los animales para las clases prácticas son de la propia escuela y proceden de la vacada de la ganadería Vista Alegre.
