martes, 19 de noviembre de 2013

DESAZÓN Y DESILUSIÓN EN ACHO

Una insulsa corrida de San Sebastián de las Palmas aguó las expectativas de la afición de Lima por un cartel que en el papel era uno de los más atractivos. La terna contagió la mandanga y sólo el buen Perera lució con dignidad la borla.

(Textos y fotos de Juan Medrano Ch. Especial para Perú Toros)


Las figuras del toreo o los que asumen esa categoría sin serlo, deben recordar que el espectáculo lo paga el público. Que por más toro destartalado, manso o bronco que salte a la arena, hay que torearlo con dignidad, justificando los honorarios, con las ventajas que da la técnica y los artificios del toreo, despachándolo como auténtico matador de toros. 

Lo visto el último domingo en Acho nos releva de mayores comentarios. La corrida de San Sebastián de las Palmas lució terciada, con mala clase y acentuados rasgos de mansedumbre que al final fueron una constante en el comportamiento del encierro colombiano. Paradójicamente, la temporada pasada este hierro fue catalogado como el mejor del serial nazareno.