Gran tarde de Sebastián Vargas en el cierre de la feria de Puquio. Los toros acusaron sosería y los toreros tuvieron que encimarlos para justificarse.
(Desde Puquio, Ayacucho, Perú, textos y fotos de Juan Medrano Chavarría. Especial para Perú Toros y la revista Fiesta Brava)
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El final fue entre sombras, con Sebastián Vargas como triunfador absoluto de la feria de Puquio.
La corrida volvió a desentonar y los toreros tuvieron que poner el pecho, cada cual en lo suyo; maestría y pundonor, virtudes de la terna.
La sosería de los toros impidió mayores emociones. Pero hubo un toro, el lunar, que se movió un punto más que sus hermanos y propició la euforia en los tendidos, con un torero que puso a prueba las grandes facultades que posee para la lidia, entendiendo, con cabeza y pausa, las condiciones del morlaco. De resultas que tras un espectacular tercio de banderillas, un justo trasteo de muleta y un contundente espadazo, la tarde supo a gloria para Sebastián Vargas.
