Fuente: Expreso.pe
–Puedes comenzar contándonos cómo se celebran las fiestas taurinas en Chiclayo….
Aquí en Chiclayo, por lo general, se festejan uno o dos corridas al año, porque también se dan festivales que no se llevan a cabo con la formalidad que se debería, también tenemos un lugar a unos 40 minutos de aquí que se llama Tumán, en donde se dan unos 5 o 6 festejos taurinos cada año. Hemos percibido que hay bastante afición en las corridas de toros, pero debido a que no hay plazas se tienen que hacer festejos sin las condiciones para que éstos sean del mejor nivel.
–¿Has tenido oportunidad de analizar este tema y esas condiciones a las que te refieres?
En Chiclayo se realizan, como señalé, 5 o 6 festejos. He tenido la oportunidad de viajar a muchos lugares, sobre todo a la región Cajamarca, que es el lugar donde hay más arraigo taurino y me doy cuenta que Chiclayo poco a poco va creciendo, no en el tema del festejo propiamente dicho, sino en el de la formalidad. Si nos damos cuenta, el número de festejos anuales no aumenta, pero sí su calidad y así la calidad de la celebración. Por ejemplo, las corridas se llevan a cabo ahora ya no con uno o dos sino con seis toros, con picadores, alguaciles y con los reglamentos del caso.
Aquí en Chiclayo, por lo general, se festejan uno o dos corridas al año, porque también se dan festivales que no se llevan a cabo con la formalidad que se debería, también tenemos un lugar a unos 40 minutos de aquí que se llama Tumán, en donde se dan unos 5 o 6 festejos taurinos cada año. Hemos percibido que hay bastante afición en las corridas de toros, pero debido a que no hay plazas se tienen que hacer festejos sin las condiciones para que éstos sean del mejor nivel.
–¿Has tenido oportunidad de analizar este tema y esas condiciones a las que te refieres?
En Chiclayo se realizan, como señalé, 5 o 6 festejos. He tenido la oportunidad de viajar a muchos lugares, sobre todo a la región Cajamarca, que es el lugar donde hay más arraigo taurino y me doy cuenta que Chiclayo poco a poco va creciendo, no en el tema del festejo propiamente dicho, sino en el de la formalidad. Si nos damos cuenta, el número de festejos anuales no aumenta, pero sí su calidad y así la calidad de la celebración. Por ejemplo, las corridas se llevan a cabo ahora ya no con uno o dos sino con seis toros, con picadores, alguaciles y con los reglamentos del caso.